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30 de septiembre de 2011

nube mental. STADE RENNAIS 1 - ATLÉTICO 1

"Sufrimos su intensidad. No nos dejó tener libertad de acción." Manzano.

  • Mal Atlético. Sin respuesta física ni alternativas desde el balón. Le pasó un tren por encima.
  • Arda y Diego se enredaron en una zarza. Siempre superados, ni desplegaron juego ni encontraron soluciones.
  • Pese al mal partido, el empate fuera es buen resultado y el Atlético sigue líder de grupo con 4 puntos.


  • El Atlético rascó un empate sobre la bocina tras estrellarse durante más de una hora contra el despliegue de intensidad y asfixia de un Stade Rennais plagado de suplentes. La embestida de los franceses desactivó la fe del clan de Manzano en la construcción a través de la pelota, a pesar de que el técnico olvidó sus rotaciones habituales y apostó por el once de los cromos, donde solo se echó en falta a Reyes, cada vez más alejado de su mejor versión. 

    Pretendía Manzano dar un golpe de autoridad de mano de sus mejores hombres y volver a los planes preCamp Nou, cuando el equipo danzaba y Falcao remachaba, pero no halló sus raíles y se estampó contra un muro de hormigón armado. El conjunto bretón se aplicó en la disputa física y planteó una partido de una intensidad extraordinaria, precisamente el día que el Atlético apostaba por sus estilistas. El resultado fue un atropello que solo se desatascó cuando el equipo renunció al control y se entregó a la histeria de la Salvio, que reventó el último tercio del encuentro y fabricó el tanto de Juanfran.



    ahogado. El Stade Rennais propuso choque y disputa, pero el Atlético estuvo flácido en sus desarrollos y sin intensidad para la recuperación. Se quedó desactivado desde la presión. Ahogaron los pasillos y convirtieron la zona de posesión atlética en un embudo que nunca fue capaz de dejar pasar fútbol. Como no avanzó, se retrasó para mantener el balón y terminó por convertir su posesión en un manoseo defensivo sin interés ningún.

    futbolín. Orden posicional extremo. Ni una ruptura, ni un desmarque. Sin alternativas de salida para los centrales, el balón se quedó atrás. Gabi y Diego, encargados del siguiente escalón, no mezclaron. La solución terminó siendo saltarse las zonas intermedias y pasar directamente a los atacantes. Muy poco de Arda en la creación.

    errores. El Atlético se atrapó en una espiral de desaciertos ante un rival que le presionó con insistencia. Su zona de ataque quedo obligada a recibir constantemente de espaldas. Dificil de controlar y riesgo de robo y salida rápida del rival. Sin cambios de registro, ni de velocidad, ni de posición.

    diego. El brasileño retrató el partido del Atlético. Sufrió de mediocentro. Incómodo en un bosque de atletas, se sintió agobiado, superado y cometió errores de bulto propios de la intensidad de la presión del rival. Estuvo blando ante Dalmat, que le buscó la espalda una y otra vez, y se fue de él con facilidad en el tanto francés. Cuando el Stade Rennais bajó el pistón, ya con el 1-0, encontró su lugar, se soltó y pudo aparecer en zonas de interés.

    miranda. Bien en la recuperación, en la salida y en el orden. La mejor noticia de un sistema defensivo titubeante es el crecimiento del brasileño, a día de hoy el mejor defensor del equipo. Se empeñó en no zarandear el balón, pero cada salida suya era una búsqueda infructuosa de voluntarios.

    controldescontrol. El Atlético hizo inútil la posesión. De nada sirve tener la pelota si no sabes qué quieres hacer con ella. Controló el partido, no hizo nada con el control y cuando se descontroló fue cuando empezó a generar oportunidades. El equipo demostró tener plan B, aunque llegará tarde.

    salvio. Si el partido lo embarraron los titulares, lo rescataron los suplentes. Liderado por Salvio, efervescencia pura, el equipo se descabalgó, obvio el fútbol control y llegó con embestidas verticales. El argentino le dió varias vueltas de tortilla al partido hasta que lo puso de su lado. Interesante revolución para fases tan estáticas.

    líder. El empate mantiene al Atlético líder de su grupo. Ganó en casa y empató fuera. No es mal arranque. De los 48 equipos de la competición, solo 5 han conseguido el total de los puntos (PSV, Sporting, Athletic, Brujas y Anderlecht). Empatado a 4 puntos con Udinese, a cierta distancia de Stade Rennais y Celtic, con 1. El margen de clasificación del Atlético tras dos partidos jugados está en 3 puntos. Buen colchón.

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    25 de septiembre de 2011

    lección I. mirar. BARCELONA 5 - ATLÉTICO 0

    "Las alternativas son pocas [...] Nos desactivaron [...] Es materialmente imposible discutirle la posesión." Manzano.
    "Ahora jugaremos nuestra liga." Tiago.

  • Apoteósico Barcelona. Sus rondos pasan a hipervelocidad. 66% posesión. Xavi se movió en cifras de pase imposibles: 153/139.
  • A nivel planificación, un encuentro para ignorar. No forma parte de la realidad en la que vive el Atlético.
  • El Atlético aún no ha marcado fuera de casa (6 GC). El Barcelona aún no ha encajado en casa (18 GF).


  • Un Barcelona monumental, con infinitos recursos para la lírica y un despliegue de fútbol coral sin fisuras, pasó por encima del Atlético, todo buenas intenciones, y dejó para la posteridad una lección de fútbol en su máxima expresión. En una primera parte desorbitada, llevada al extremo de la renovación de los preceptos futbolísticos, el Barça le metió un meneo salvaje al Atlético, al que convirtió en un sonajero que sacudió una y otra vez.

    A un simpático Atlético que pretende abrirse una senda a través de la apropiación del balón y crece a través de conceptos heredados, se le apareció de repente el maestro de todos los métodos, el equipo que mejor ha interpretado el juego colectivo en la historia de este negocio. El Barcelona dió una cátedra y el Atlético asistió invitado en primera fila. En otro escenario, hubiera podido ser un alumno que mirara de frente al maestro, pero en estos momentos el Barça se encuentra en plena actualización de un modelo. No molesten.

    La capacidad de incidencia del conjunto rojiblanco en un evento monográfico de tal magnitud era mínima. El nivel de los ajustes que hubiera podido realizar hubiera levantado apenas una pequeña brisa en el tornado que pasó por el Camp Nou. Se enfrentó al mejor en uno de sus mejores momentos. El Atlético debe superar la mirada crítica en un acontecimiento así, por extraordinario e irremediable. Entregarse al determinismo. No había prácticamente nada en su mano que fuera capaz de hacer para cambiar su destino. No fue siquiera el Atlético errático de anteriores cruces con los blaugranas. Cometió pocos descuidos de bulto y minimizó casi todas las facilidades que pudiera dar al rival.

    Excelencia sin adjetivos. La interpretación máxima de un juego sencillo al que se juega en muchos lugares y de muchas maneras distintas. Una exhibición balompédica para no tener camiseta. Es difícil identificar la historia cuando aparece en los momentos cotidianos, pero se está escribiendo estos años la página más excelsa de este deporte. El presente ya está en los libros. El mejor equipo de fútbol de todos los tiempos.



    lección. El Barça es hoy la vanguardia del fútbol moderno. Es más, es vanguardia de cualquier campo que no plantee el estatismo: evolución de conceptos, apuesta por la creatividad, inconformismo, puesta en duda de preceptos propios, importancia del objeto central -balón-, movimiento contínuo, interpretación coral y además, una inagotable lectura didáctica.

    pep4.0. De la mano de Guardiola, el equipo actualiza programación y reinterpreta conceptos con una facilidad pasmosa -número de defensas, ausencia de delantero, eliminación de laterales, 4 mediocentros en rotación continua...- y pasa de un dibujo a otro sin perder prestaciones. Ayer, Guardiola jugó sin un solo defensa central. Plantó tres líneas de tres y dejó a Fàbregas flotar entre las dos últimas.

    +qmessi. A pesar de los tres tantos, el Barça fue mucho más que Messi. El juego interior -Busquets, Thiago, Xavi, Fábregas- fue a tal velocidad que convirtió a los jugadores atléticos en espantapájaros. Además, el Barça exageró la amplitud de campo, con Villa y Pedro partiendo de la cal en diagonales imparables para Perea y Antonio López. En su juego de extremos, Guardiola fue más Cruyff que nunca y partió la defensa atlética, con demasiada anchura que defender.

    alineaciónextraña. En realidad, apenas tuvo trascendencia. A Manzano se le fue la mano con las rotaciones, cambió media defensa -Godín y López estaban inéditos en Liga- y sentó a Arda. En cualquier caso, pensar que cualquiera de ellos le hubiera robado protagonismo al show del Barça es engañarse. Debería ser un debate menor.

    disposiciónextraña. Manzano apartó el rombo y ubicó su 4-3-3 con Diego y Reyes abiertos a las bandas y Falcao en el eje del ataque. Pretendía dar alas a su juego exterior y aprovechar la salida rápida. No lo consiguió y renunció por completo a la pelea del balón. Los tres mediocentros atléticos vivieron en el interior de un contínuo rondo rival, gastando aire en una presión siempre en inferioridad. 

    presiónazulgrana. Brutal, asfixiante. Destrozó la intención rojiblanca de salir jugando y llevó la posesión del Barcelona a límites sonrojantes: 71% la primera mitad. Solo Miranda -38/36 en pases- aguantó con temple la embestida y consiguió a ratos un salida limpia. El brasileño además, estuvo acertado al corte -9 recuperaciones por las 3 de Perea y Godín-. 

    presiónrojiblanca. La primera línea de presión se echó atrás. Diego y Reyes se alineaban con Tiago y Gabi, formando un 4-1-4-1 demasiado plano para contener la primera línea de posesión. No hubo presión sobre los defensores blaugranas y cuando el balón llegaba a los medios, ya estaba en modo hipervelocidad.

    reyes. Está perdido. Es pronto para saber cuánto de su bajón tiene que ver con la salida de Quique Flores, mentor y responsable absoluto de su recuperación futbolística de los últimos tiempos. Le sobra calidad, pero su juego sin compañeros tiene aún menos sentido en un equipo que pretende crecer desde el colectivo. Ante el Barcelona, estuvo ausente, poco solidario y chupón.

    reacción. En la segunda mitad, pasó a un 4-2-3-1 clásico, insertando a Arda y Salvio en las bandas y centrando a Diego. El equipo cogió aire y, aún con la misma baja posesión, ganó intensidad y algo de presión. Con el turco, Diego ganó un socio para aguantar el balón y los mediocentros -Gabi, Tiago- se desapretaron el corsé. También es cierto que el Barcelona bajó el ritmo. Mucho.

    messi. Pues eso.

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    22 de septiembre de 2011

    falcao reloaded. ATLÉTICO 4 - SPORTING 0

    "Falcao nos ha podido meter seis." Manolo Preciado.

  • Intratable Falcao: marcó dos tantos, provocó otro y mandó un balón a la madera. Lleva 5 goles en 3 partidos. Ya es Pichichi.
  • Segundo partido consecutivo que Courtois no realiza paradas. 218 minutos imbatido. Lleva 1 gol en 4 partidos. Ya es Zamora.
  • Gabi asistió en los cuatro tantos, tres de ellos a balón parado. La estrategia se vuelve un filón.


  • Asomó el Sporting por el Manzanares en el peor momento posible, con el Atlético en estado de euforia y su arma principal recién recargada. El desenlace fue inmediato: Falcao despedazó al conjunto asturiano con una gama interminable de acrobacias, tan plásticas como efectivas. El colombiano firmó dos tantos y medio, pero sobre todo, sacó al equipo de un encuentro que podría haberse emboscado en algunos tramos de tedio de la segunda mitad.

    A parte de su artillero, el Atlético lució poco. Manzano alineó un equipo remozado, con algunas variaciones producto de las planificaciones de curso largo. Un once retorcido, que resultó más áspero en mediocampo y pasó tramos de bloqueo, pero que no rehuyó la senda de la construcción de un estilo propio a la que le conduce su técnico. La propuesta fue la misma, aunque el despliegue fuera más denso. El Atlético volvió a extender el tapete y dejó deslizar el cuero obediente entre casacas rojiblancas. Pero con piezas distintas. Koke aún busca su rol, y Assunçao, excelente en el juego de posición, apenas aporta en el cosido y confección.

    Así, Gabi fue capitán general. Comandado por el canterano, extraordinario en la estrategia, y con una defensa obediente, el Atlético se dejó ir durante largas fases del encuentro a la espera de que los patos coincidieran en la mirilla de su ametralladora colombiana. Entre tanto, alguna correría aislada de Salvio y la presencia abrumadora de una posesión de balón incontestable. El marcador se fue acicalando y el Atlético logró una segunda victoria consecutiva que le prepara ya para enfilar pista de altos vuelos. No tardarán en llegar citas mayores. La siguente parada es inmediata: el Camp Nou.



    los40defalcao. El colombiano funciona como una caja registradora. No todos los tantos se los validan ni se los atribuyen, pero su ritmo compulsivo de anotación no entiende de actas. Continua perforando la red hasta el silbato final. Lleva camino de convertirse en un hito de la edad moderna del club. No se le atisban límites. Estuvo hambriento: 7 de los 10 remates a portería del Atlético fueron suyos.

    rotaciones. Manzano apostará toda la temporada por la dosificación. Reservó a Diego, dejó fuera a Tiago y a Suárez le sacó en la segunda mitad. El centro del campo se debilitó. Le dió una hora a Assunçao y Koke, que venían con 90 y 79 minutos de rodaje oficial. Un 12% y 11% de lo disputado, respectivamente. Se notó.

    elturco. Arda fue invisible. Apenas apareció -48/41 en 90 minutos- y dormitó durante todo el encuentro. No le ayudó el ritmo bajo del encuentro, la dependencia de balones sobre Falcao y la falta de socios. Aún así, no hay excusa: bajo nivel del turco.

    posesióndefensiva. La posesión se fue demasiado atrás. Los defensas movieron el balón que debió circular veinte metros por delante. Tras Gabi -77/69-, los cuatro defensores fueron los futbolistas en mayor contacto con el balón: Miranda -64/58-, Filipe -61/50-, Domínguez -53/47- y Silvio -53/43-.

    bajadatensión. El Atlético tuvo media hora insportable. Balones horizontales y nula presión del Sporting. Assunçao sirve para barrer la zona, pero se ausenta en la creación. La salida de Suárez dió otro aire.

    primerapresión. Excelente la línea de primera presión -Falcao, Salvio, Arda- hasta que les duró la gasolina. Hicieron perder innumerables balones a los defensores asturianos. Es la primera línea de recuperación, el robo indirecto.

    koke. Las 2ª temporadas de canteranos siempre afectan. Se vió con Domínguez e incluso con De Gea. Tras perderle toda la pretemporada, Manzano le quiere introducir con calzador: dos titularidades en una semana -Celtic y Sporting-. No entra al ritmo del equipo. No se posiciona, no encuentra su rol y deambula por zonas sin importancia. Verde.

    carriles. Partido completo de los laterales Silvio y Filipe. La sincronización de ambos para equilibrar su aportación ofensiva fortaleció las líneas de defensa y ataque. Les faltó frescura, pero supieron llegar por sorpresa y no de manera posicional. Están siendo importantes. Deben ser decisivos.

    mirandadomínguez. Se vieron obligados a mantener el balón durante fases largas y no les quemó. Cada vez se sienten más seguros en la posesión y decisivos para la salida. Miranda crece en un equipo en buena dinámica y Domínguez hace notar el brazalete. El madrileño anotó su primer tanto de la temporada.

    gabibalónparado. El jugador atlético que más rápido ha entendido que Falcao remata un melón. Se dedicó a servir bandejas enteras, la mayoría a balón parado. El colombiano le marcó la zona y el canterano obedeció. Y por ahí cayó el partido. Eso es cerebro.


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    19 de septiembre de 2011

    ruge falcao. ATLÉTICO 4 - RACING 0

    "Hoy es el principio de una larga historia de Falcao en el Atlético." Manzano.

  • El combiano hizo 3 tantos y lleva ya 4 en 158 minutos disputados en el Calderón (Liga y Europa League).
  • Manzano retrasó a Diego a la línea de medios, donde manejó los hilos del partido: firmó 55 de los 323 pases del equipo en el primer acto.
  • El Atlético tuvo una posesión del 67%. El Racing no remató a puerta. No hubo disputa.


  • Solo le faltaba el gol a un Atlético que ya venía cumpliendo jornadas atrás con todos los preceptos del buen estilo balompédico. Empeñado en resolver sus cuestiones a través del balón, el conjunto de Manzano está empezando a sentir la inercia creciente de sus protagonistas principales. La aparición fulgurante de Falcao, que pegó tres zarpazos en una hora, trasladó al fin la apuesta futbolística al marcador, con concluyente resumen productivo: por el camino del cuero, tarde o temprano se llega a los resultados.

    El colombiano inyectó gol en vena a un equipo que venía rodándose en su gusto por la posesión y la elaboración artesanal del juego. Gran culpa tiene Manzano, otrora insulso especulador, que ingenia sistemas imposibles donde sus talentos floten sin impedimento. Así, Diego, cerebro iluminador, encontró por delante la movilidad de Arda, Reyes y Falcao, en un poker balompédico tan novedoso como excitante.

    Sigue el Atlético un proceso evolutivo que le lleva a crecer un escalón cada semana, según sus piezas van encajando el mecano. Goleó a un Racing enclenque, que si ya va justo, pagó las bajas de cuatro hombres capitales -Diop, Colsa, Kennedy, Munitis- y llegó al Calderón hecho un andrajo. El conjunto cántabro fue un sparring en manos de un Atlético lanzado, casi en estado de euforia, que pegó lo necesario antes del descanso y luego se dejó llevar. Debutó Pizzi, anotó Adrián y sonrió un Calderón que no esperaba hace dos meses encontrarse con semejante sorpresa sobre el césped. Es el nuevo Atlético, y sabe jugar al fútbol.


    falcaokiller. Si el gol se paga, Falcao es una inversión. El colombiano es un especialista, un superdotado de la anotación. Domina la portería, el remate, las intuiciones del portero. Rebusca entre las debilidades de su marcador y pellizca en el momento justo. Sus mecanismos se van haciendo familiares, le encontró Reyes, primero, y Arda, después. El primer tanto fue una declaración de principios: acompañamiento, búsqueda del vacío, ruptura hacia atrás, control, remate seco. El área es su hábitat, que busque el balón fuera no ayuda. Gol, siempre gol y poco más que gol.

    manzanamecánica. Cabe una mención especial a Manzano, técnico bajo sospecha, que ha superado lo que anunciaba ser el mayor vacío de la historia reciente. El jienense ha construido un grupo alrededor de las buenas intenciones y está sabiendo dejar campar a cada cuál en su espacio. Sin rigidez, sin corsés, sin una legión de espartanos para equilibrar una pizca de talento. Manzano lo pone todo. Saca lo mejor que tiene y lo inunda de confianza y responsabilidad. La capacidad de mando de dos recién llegados como Diego y Arda va más allá de sus curriculum. Dominan desde el talento. Es la nueva aristocracia atlética.

    mecánicamanzana. No hacer a los futbolistas esclavos de un sistema, la apuesta indecente de futbolistas ofensivos en un once y la gestión de las variantes del equipo. Grandes éxitos de Manzano, que sigue explorando la pizarra. Afianza su línea de 3 medios, donde Diego se soltó más que Gabi y da flexibilidad a los 3 siguientes. Un teórico enlace -Arda- con mucha movilidad, y una delantera Reyes-Falcao retocando su ubicación en relación a su perfil determinado.

    flexibilidad. El 4-3-3 no tiene ataduras, sino intenciones. Con gran naturalidad, Manzano pone el sistema al servicio de los futbolistas, y no al revés. El guión se escribe más con el balón que con la pizarra: deja flotar a Diego con un par de escoltas; baila a Reyes de una banda a otra; y libera a Arda para la asociación interior. Desde esos criterios, la movilidad es máxima. 3 crean, 3 definen. Sin limites zonales. En los movimientos sin balón, la rotación de los puestos y la alta presencia de perfiles ofensivos, este Atlético recuerda al mejor Arsenal.


    reyessebusca. Con Arda y Diego detrás, Reyes se enfundó casaca de atacante y se movió con la libertad que le da tener a Falcao como referencia. Al sevillano le falta aún asociación con los nuevos, tal vez porque su juego exige conducción y campo por delante. El curso pasado le (mal)acostumbró a llevar la iniciativa desde la acción individual. En este grupo se debe reciclar. Debe afinar su juego en zonas donde rentabilice su capacidad para desestabilizar. Ni aporta en la creación ni debe solapar zonas interiores. Su fútbol debe pasar por acelerar la zona de tres cuartos.

    calidad+caos. En su sitio, todos son felices, pero hay momentos de locura posicional colectiva. Al ataque le faltó organización y le sobró crispación. Zonas saturadas, grandes vacíos. Casi todo fruto de la falta de automatismos y solucionable con el paso de los partidos. Tiago llegó bien, rompiendo el ataque posicional, pero le robó zonas de remate a Falcao, que tampoco abrió huecos a la llegada de la segunda línea. Arda dejó sin balón a Reyes, que abusó del regate en parado.

    evolution. Repartir el talento en más de un futbolista es un signo de evolución futbolística. Así, el crecimiento del Atlético de este curso se asienta desde el funcionamiento coral. En términos productivos, se ha especializado. Diego es el gran talento creador, la bisagra funcional, pero no se le exige resolver el gol, esa veta corresponde a Falcao. Reyes y Arda son la línea de aceleración, donde el juego de posesión debe encontrar las rampas hacia el área. Es una evolución al monopolio referencial de Torres o Agüero. Este Atlético genera especialistas.

    10eldiego10. Con el brasileño en el campo, de cada 6 pases que dió el equipo, 1 era suyo. Su protagonismo es innegable; sus prestaciones, inagotables. El brasileño es una presencia constante, sin intermitencias. El martillo pilón del buen gusto, el pase interior y las intenciones a ras de césped. Su presencia da sentido al equipo y evita que se rompa en defensores y atacantes. Diego es el ancla, el ojo del huracán.

    ardatotal. Gran acierto retrasar a Arda para hacer de Diego. Todo el talento situado por detrás del balón y sobre la franja de posesión siempre da el protagonismo. Funcionó primero con Diego, y después con Arda. En el caso del turco, es un descubrimiento su pausa y juego posicional. Maneja los tiempos, trabaja, manda, tiene un registro por dentro y otro para fuera. Gran inteligencia futbolística. Toca rápido y rompe sin que se le espere. Segunda línea en estado puro, la mitad del 3º gol es suyo. Futbolista constante, nadie participó más -91 pases en 90 minutos-. El juego interior del Atlético tiene fases de altísimo nivel. Con el equipo más rodado, la estructura se podría sujetar con Diego y Arda sobre un pivote defensivo. Ambos tienen equilibrio y aumentan la posesión como método defensivo.

    faserem. En la segunda mitad, retirado Diego, el equipo aumentó la posesión horizontal, defensiva. Aburrió al rival y dejó que los delanteros recibieran descansados. Defendiendo con posesión, el Racing desapareció. El fútbol lento fue menos brillante, pero bastó para defender y llevar la pelota a la zona de tres cuartos. Allí donde el talento se impone.

    gestióncambios. Buen ojo de Manzano. No forzó a Diego, que andaba tocado, pero tampoco quiso mandar un mensaje de conformismo y sacó un delantero -Adrián-. Hizo debutar al único fichaje que quedaba -Pizzi- en una tarde alegre y siguió cuidando a Juanfran. Al alicantino le busca sitio en el dibujo. Salió por Reyes y le hizo jugar por dentro, muy arriba, flotando de teórico punta. No funcionó.


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    16 de septiembre de 2011

    el calderón renueva héroe. ATLÉTICO 2 - CELTIC 0

    "Estamos en el buen camino." Manzano.

  • Diego comandó el ataque, marcó el ritmo del equipo -78/68 en pases- y cerró la actuación con un gran tanto. Todo giró a su alrededor.
  • Manzano renunció a la simetría y le hizo un traje a medida a los nuevos: Diego en el vértice del rombo, Falcao de 9 y Arda en la banda.
  • Impecable arranque europeo del Atlético: 5 encuentros, 5 victorias. 12 GF, 1GC.


  • Un Atlético a medio gas, de comportamiento incierto y ajuste estival, con margen para tumbar piezas menores, pero aún sin carrocería de primer nivel, dejó bailar a sus chicos guapos ante un Celtic tan venido a menos que no calzaba ni su mítica verdiblanca horizontal. Disfrutó el Calderón una noche abierta a sus cromos nuevos, atento a la presencia de una franja ofensiva de nuevo estilo, la que debe abanderar los nuevos tiempos y que Manzano decidió presentar en comitiva en una noche europea que no improvisó guión.

    Dos minutos en su nuevo estadio necesitó Falcao para hacer su primer tanto y disimular su letargo, producto del jetlag futbolístico de llegar tarde y con prisas a los sitios. El pistolero colombiano descargó despliegue por el grupo, pero su mecanismo aún se tambalea en el registro colectivo. Un futbolista que vive tanto de la capacidad de engancharse a las bandejas de sus compañeros necesita de una sinergia total, una lectura mutua de movimientos que aún no se produce.

    La propuesta coral de Manzano se ha completado en cambio con un director de orquesta mayúsculo. Diego ya es nuevo héroe local. Un futbolista auspiciado por un talento descomunal, y a su vez, inducido a la irregularidad habitual de los grandes genios. Su fútbol se enquilosó en Turín y se emborronó en Wolfsburgo, pero puede reventar en Madrid. La versión beta del brasileño causó furor en el Manzanares. En menos de 90 minutos, la grada se echó a sus brazos. La sensaciones del Calderón con Diego son de incontrolada excitación, mezcla de la novedad y los brillos del juguete nuevo. Diego ya ejerce de bandera del nuevo Atleti.



    tronobuscahéroe. La comunión pueblo-héroe es indescifrable. No todos los grandes talentos la consiguen. Ese trono solo habitado en las dos últimas décadas por Futre, Simeone, Pantic y Torres; entregado y después retirado a Agüero. El lugar de privilegio que nunca tuvieron futbolistas del calado de Forlán, Kiko o Caminero. El trono del Calderón.

    héroebuscatrono. Diego tiene un carisma arrollador. Todo parte del éxito de su juego, pero se extiende a su pose como futbolista, su carácter con rivales y compañeros, el descaro para desplegar habilidades. Solo su trote ya es amenazante. Tiene mucho de lo que se le exige a los grandes referentes anímicos: talento descomunal, capacidad para liderar desde la brillantez, y la chispa justa para crear la sensación de que puede desnivelar un partido en un suspiro.

    diegoin. Manzano le dió a Diego todo lo que pide su juego: liderazgo, balón y una franja de 20 metros cuadrados solo para su despliegue. El brasileño se movió como quiso y por donde quiso. Se borró de las tareas de repliegue más sacrificadas y consiguió que el depósito le llegara casi hasta el final, a pesar de su falta de tono. A nivel táctico, para el Atlético es una bendición retrasar este año el máximo talento del equipo del área a la zona de creación. Como epicentro del equipo, Diego supervisa el juego y maneja las velocidades. Domina la pausa y el vértigo, y lo traslada al grupo.

    falcaoout. El colombiano es el fichaje que está teniendo una adaptación más lenta. A diferencia de Diego, su fútbol vive de ráfagas de explosión. Sin peso en las zonas de definición, desaparece. Pese al gol, en jugada parada, sigue estando fuera de la dinámica del juego colectivo. Sus compañeros no leen sus desmarques y él no atiende muchas de las asistencias que le dan. Además, tuvo excesivo desacierto en controles, cambios de dirección y regates. En cualquier competencia que no sea el remate, el colombiano es vulgar.


    atasco. La cara B al protagonismo de Diego es que sobra gente por dentro. Si con Reyes el trío mediocampista asumía el protagonismo con el balón, con el brasileño crean un embudo imposible. Ni Gabi ni Koke entendieron que su rol pasaba por ofrecer alternativas al juego del carioca: no se descolgaron, no buscaron zonas alternativas ni tocaron con velocidad. El pastiche se completó con dos laterales sin aporte ofensivo. Demasiadas zonas inertes, carrileros estériles y overbooking por el medio. Con un futbolista como Diego, o haces que el equipo juegue para él o le pierdes definitivamente.

    lavariantearda. El turco sí tiene un registro distinto. Aporta desborde, percute sin miedo y equilibra la zona con un buen despliegue defensivo. Tiene juego exterior e interior, pero se apunta al carro del grupo que pide el balón al pie. El interés de Arda y Diego por la conducción deja sin sentido el juego de posesión lenta y defensiva del trío mediocampista. Hay pasadores pero no receptores. Nadie pide al hueco. Laterales limitados.

    relevosmanzano. Sobre el césped, el técnico reacciona con nuevos dibujos a cada relevo, en una dinámica aún veraniega. El 4-3-1-2 en versión asimétrica dió pasó con la entrada de Reyes a un 4-2-3-1 más natural, con cada uno en su sitio. Pero con extremos, el equipo se parte. El Atlético le entregó el balón al Celtic y sufrió. Eso sí, fue demoledor a la contra. Anotó Diego y Arda estrelló un balón en la madera. El técnico llevó el experimento al extremo dando salida a Adrián y retirando otro medio. Diego se echó atrás y desapareció tratando de cubrir demasiado campo.

    artilleríamediadistancia. De los 18 disparos del equipo, 15 fueron desde fuera del área. El equipo añade un nuevo registro con la aportación de Diego (6 remates), que disparó más que nadie. Gabi, Arda, Reyes y Koke también acumularon llegada desde lejos. Mientras espera a Falcao, el equipo exprime su segunda línea.


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    14 de septiembre de 2011

    ¿puede el atlético ser tercero?

    "Nuestro objetivo es el podio de la Liga." Manzano.

  • El Atlético no entra en el podio liguero desde hace 16 años: el año del Doblete (95-96, 87 puntos con 22 equipos, 69%).
  • En las tres últimas temporadas, el tercer puesto de la liga no se ha cotizado nunca por debajo de los 70 puntos (61%).
  • La mejor puntuación del Atlético desde el Doblete fue en la 08-09 (67 puntos, 58%).


  • Cerrada la plantilla, comprado el mimbre y arrancada la competición liguera, a Manzano le ha entrado sobredosis de fe y no ha dudado en lanzar el reto más ambicioso de los últimos tiempos. El desconocimiento de las nuevas figuras, un novedoso estilo y un plantel con proyección hacen difícil identificar cuál el techo real del grupo. Con la mecánica aún sin ajustar, casi todas las sensaciones son positivas. El margen de mejora es el más amplio de todos los equipos de su sector. Las señales apuntan en la dirección correcta, pero ¿es real el objetivo? ¿Puede el Atlético ser tercero?

    Más allá de pensar en nombres para los rivales directos para el podio, resulta interesante plantear a estas alturas de curso si el Atlético es capaz de generar el puntaje que da acceso a ese tercer puesto. Si repasamos las últimas temporadas, el 3º y 4º puesto se han repartido en unos baremos parecidos, por lo que es posible sacar patrones respecto a los puntos.


  • Sumar por encima del 54% de puntos en juego (desde 61 puntos al final de año), es 4º puesto virtual.
  • Sumar por encima del 60% de puntos en juego (desde 68 puntos) se aspira a pelear por el 3º puesto.


  • En términos de puntaje, es más útil hablar de porcentaje de puntos logrados sobre el total de los disputados que de puntos en bruto. De ese modo, es posible calcular en cualquier jornada los baremos en los que un equipo se debe mover para conseguir sus objetivos. Si tomamos como referencia los últimos cinco años, el listón para el tercer puesto está en superar el 61% de puntos en juego, lo que lleva a puntaje a partir de setentas. ¿Puede el Atlético hacer 70 puntos?

    Si ponemos al Atlético como medida y dividimos la competición en los distintos niveles de rivales, podríamos concluir que existen 4 grupos distintos de rivales ante los que se deben trazar objetivos distintos. De este modo, y sin tener en cuenta potenciales rivales para ese 3º puesto, se puede plantear cómo deberían ser los dobles enfrentamientos directos contra cada rival liguero. ¿Cuántos puntos debería conseguir el Atlético en cada doble enfrentamiento directo?





  • La clave de teorizar sobre los enfrentamientos directos no es tanto tratar de que se cumplan, sino generar grupos de puntaje, con los que controlar los márgenes de objetivo que se desvían por arriba o por abajo.
  • En este sentido, es un teoría que contempla desajustes. Las posibilidades que se den esas combinaciones de resultados es prácticamente cero. Pero es útil para controlar variables. Saber, por ejemplo, que tras la Jornada 3 (empate vs Osasuna, derrota en Valencia), el Atlético se mueve dos puntos por debajo de objetivo.
  • 4 tipos de rivales: los que nunca ganará; con los que compite directamente; con los que es superior de partida; y a los que debe ganar en cualquier caso.
  • Se tratan por defecto dos variables: que en casa se gana más que fuera; y que ante equipos 'débiles' se puntúa más que ante los 'fuertes'. Parece obvio, pero un repaso de otras temporadas confirma que no siempre se cumple.
  • Goal-average importa. En los últimos cinco años, el Atlético perdió 2 veces (06-07, 10-11) y ganó 1 vez (07-08) la clasificación europea por los enfrentamientos directos. 3 de 5.
  • La temporada pasada el ATM hizo 58 puntos (51%). Dividido por zonas: ROJA (0pts, 0%), NARANJA (11pts, 36%), AMARILLA (33pts, 68%) y VERDE (14pts, 58%). Es decir, perdió menos puntos (4) ante rivales directos de zona NARANJA que ante "débiles" de la VERDE (10). *Cambiando Betis, Rayo y Granada por Deportivo, Hércules y Almería.
  • Es una teoría. Siempre fallan.

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    11 de septiembre de 2011

    este atleti no se traiciona. VALENCIA 1 - ATLÉTICO 0

    "Me quedo con el control y la capacidad para acorralar al rival. Faltó el gol y habrá que esperar." Manzano.

  • Discreto debut de Falcao, que no remató ningún balón. El Atlético lleva 180 minutos sin marcar.
  • Gran Diego Ribas. Lideró la ofensiva en la segunda mitad. Manzano le metió de mediapunta en el 4-2-3-1 primero, y el 4-1-4-1 final.
  • El Atlético sigue apostando por el juego de posesión -54%-. Volvió a superar al rival en la circulación: 557 pases vs 426 del Valencia.


  • El Valencia dió ante el Atlético un golpe de autoridad, más que de juego. Un partido atropellado, intenso, rasgado en un suspiro por una aparición fabulosa de Soldado, pistolero del campeonato -4 tantos en 2 citas-, pero que deja el rastro de intenciones que Manzano viene sembrando desde su llegada. Venció el conjunto ché porque aún va un escalón por delante, pero terminó viéndose débil, acorralado y sin munición ante la estampida rojiblanca del último tercio del encuentro, liderada por un animoso Diego Ribas. La caballería atlética llegó tarde, pero el toque de corneta mandó un mensaje que los valencianistas no esperaban escuchar: la diferencia entre las dos grandes segundas fuerzas del campeonato se ha recortado. Equipos del mismo rango pero en distintas fases de construcción, que impidió la disputa real del puntaje.

    Encendió pronto Emery el martillo pilón del Valencia, que dedicó la primera media hora a percutir el centro de la defensa a través de Soldado, y a lanzar su vertiginoso juego en los costados, con Miguel meteórico. Se acercaban los locales, pero Courtois se agigantó en un par de pedradas que el chaval convirtió en arenisca. El belga es un portero mayúsculo, en otra órbita. Con 19 años muestra una seguridad que probablemente solo posea otro portero de su generación, precisamente el anterior ocupante del arco atlético. La elección de su titularidad avala el olfato de Manzano.

    Atropelló el partido que el Atlético respondiera con la misma intensidad. Falcao y Adrián revoloteaban por delante de Reyes en un juego de desmarques que el asturiano aún domina mejor que el fichaje estelar atlético. Al colombiano se le vió incómodo, desencajado y con el ánimo de un jet-lag interminable. No tanto fuera de ritmo, sino más bien aletargado y perdido en el dibujo del grupo. Se movió lejos del área, cayendo a los costados, donde su juego no tiene interés, y cuando buscó el remate se estrelló contra el hormigón de Rami y Víctor Ruiz.

    Un abismo con Soldado, en estado de gracia. Recién arrancada la segunda parte, Miguel cabalgó por el pasillo que le dejó Filipe y metió un comba para la llegada del delantero, al que le fue la vida en el remate. Desplazó a Miranda, le superó en el salto y reventó un testarazo a la red de Courtois. El gol le llegó al Valencia en su penúltimo esfuerzo, justo antes de dar la batalla balompédica por perdida y administrar esfuerzos para el achique. Porque a partir de ahí, el campo se inclinó.

    Manzano abrió el armario y sacó consecutivamente a Arda, Diego y Juanfran. Todo lo que tenía, hasta terminar con un dibujo desbrozado, imposible, retirando dos mediocentros para arremeter con una línea de cinco atacantes por delante de Gabi. Panza arriba y a empeñones, pero con orgullo, el Atlético empujó con aires de grandeza. Con el compromiso que sienten los equipos que se deben obligados a ganar siempre sin excusa. Olor a otras épocas. No lo logró, pero el espíritu servirá en otras citas.

    La aparición de Diego fue un bálsamo. La convicción para el resto del plantel de que el talento está de su lado. Para el brasileño no ha habido adaptación. Anunció prudencia Manzano ante un futbolista que llevaba tres meses fuera de ritmo, pero nadie imaginaba que estuviera en semejante nivel. No había duda de sus cualidades, pero sí de su predisposición a ponerlas en liza. En Mestalla avanzó pinceladas de su estado anímico: pidió el balón, acudió al rescate, se asoció y llegó.

    El Atlético se instaló en el balcón del área con toda su artillería y arrolló al Valencia, que resistió con un Guaita estelar hasta el último suspiro. No ganó, porque se gripa en la última franja del campo, pero sus carencias parecen solucionables. Pasan por mejorar la fase de definición, la que más precisión exige, y donde las mejores piezas han llegado con retraso.

    Este Atlético está verde, pero es un novato de grandes aspiraciones. La ambición le viene de la construcción de una hoja de ruta donde se ve protagonista, donde se exige un estilo por encima del resultado. Perder no es una opción, ni siquiera en un campo donde se hubiera disculpado una derrota mínima. Afina su actitud ganadora y su margen de mejora es enorme. Le queda el ajuste necesario de quién deja deberes sin hacer. Su engranaje a mediados de septiembre aún chirría como debió hacerlo en agosto. Pagará con puntos utilizar una competición para terminar su fase preparatoria. Pero está en el camino. Le queda empezar a recorrerlo, y que, cuando lo haga, sus rivales no se hayan alejado demasiado.





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